La doctora Jimena Silva presentó los principales ejes de la investigación «Mercantilización de las emociones: el lugar simbólico de las trabajadoras sexuales en las emociones de los hombres de la gran minería del cobre chileno».
Una exitosa ponencia sobre el estudio de las emociones que circulan en la gran minería del cobre chileno, presentó la académica de la Escuela de Psicología UCN, Dra. Jimena Silva, junto al académico de la Universidad Bernardo O’Higgins, Pablo Zuleta, en el marco del conversatorio «Entre la reproducción y la transformación del género: El trabajo minero», organizado por el Magíster en Género e Intervención Social de la Universidad Bernardo O’higgins.
En el encuentro, la académica presentó los principales ejes de la investigación «Mercantilización de las emociones: el lugar simbólico de las trabajadoras sexuales en las emociones de los hombres de la gran minería del cobre chileno», representando junto al doctor Zuleta al equipo de investigación FONDECYT 1180079, también conformado por María Constanza Castro de la Escuela de Periodismo UCN, Estefany Castillo de la Escuela de Psicología de la Universidad Católica y Claudio Araya de Diabla Cine.
Mercantilización de las emociones
Durante el conversatorio, el panel de profesionales abordó temáticas como el lugar simbólico que ocupan las trabajadoras sexuales en la vida del hombre minero; el rol que cumplen las parejas de los trabajadores en esta triada; situaciones de acoso sexual y laboral en la industria minera; la masculinización del comportamiento de mujeres en la minería; el impacto del trabajo minero en la salud mental; la violencia intrafamiliar y la figura del padre periférico.
La doctora Silva explicó durante el encuentro que «las parejas de los mineros están cumpliendo con el mandato de la ficción de la familia nuclear chilena, que es ser la madre ocupada del cuidado doméstico y de crianza», y agregó que «el trabajador minero por su parte, se piensa a sí mismo como un hombre que hace sacrificios por el bienestar de la familia, sin embargo sufre simbólicamente por estar ausente y ser un padre periférico, buscando consuelo en la mujer del comercio sexual que no le exige ni lo reta».
Sobre la masculinización del comportamiento, Silva señaló que «las mujeres que trabajan en minería acomodan sus hábitos al escenario en el que se encuentran para sobrevivir en un entorno androcéntrico».
«En este fenómeno de mimetizarse, se baja la guardia respecto de exigir los derechos para cambiar las políticas laborales con perspectiva de género y transformar la realidad desde dentro», añadió la académica de Psicología UCN.
En el caso de los hombres, el doctor Pablo Zuleta explicó que «el embrutecimiento del trabajo lo entendemos como una estrategia defensiva para no enfermar mentalmente, dándole valor al sacrificio con la virilización del cuerpo subjetivo». Zuleta añadió que este fenómeno «tiene que ver con renunciar a cierta sensibilidad para sostenerse en el trabajo y en el colectivo de varones demostrando que se la puede».
En contraparte, el académico indicó que «la mujer minera va con punta de lanza proponiendo temas que los varones no ponen sobre la mesa, como el cuidado de la salud y las condiciones del trabajo».
Silva y Zuleta también anunciaron que el lanzamiento del libro «En el cabaret del cobre: La mina y el sacrificio del erotismo» se realizará durante el mes de mayo junto a la publicación del documental «Angelina Duval y el cabaret del Cobre», realizado por el director Claudio Araya de Diabla Cine.