En entrevista con Periodismo UCN, la académica experta en estudios de género, relató la experiencia de su período sabático en la Facultad de Comunicaciones de la PUC. Además, se refirió al estallido social y las demandas feministas presentes en la contingencia nacional.
En el marco de su período sabático en la Pontificia Universidad Católica de Chile, la académica de la Escuela de Periodismo UCN, Paulina Salinas, desarrolló nuevos artículos científicos sobre el vínculo género y sustentabilidad; análisis de estereotipos de género; discursos simbólicos y no simbólicos presentes en la cultura académica y pedagogías invisibles en el sistema universitario.
Dentro de estas investigaciones, la doctora en Ciencias Sociales que posee una extensa trayectoria en estudios de género, celebró la reciente publicación internacional del libro «Actioning the Global Goals For Local Impact», que incluye un capítulo de su autoría dedicado a la igualdad de género.
Género y sustentabilidad
El libro que destaca la ciencia de la sustentabilidad en enfoques emergentes de investigación, educación y política, también cuenta con un análisis de género elaborado por la doctora Salinas junto a la investigadora colombiana, Isabel Franco, y la doctora Ellen Derbyshire de la Universidad de Queensland, Australia.
«Con Isabel hicimos un primer capítulo en español donde realizamos un análisis comparativo del caso de las mujeres en minería en Chile, con los casos en regiones como África y el Sureste Asiático», explica Salinas en entrevista con Periodismo UCN.
«Luego de ese trabajo que fue publicado por ediciones RIL y la UCN en el 2019, preparamos otro texto que aborda el enfoque de sustentabilidad y cómo la transformación de género en la industria es una conditio sine qua non para lograr el cambio», añade.
– Para las y los investigadores siempre la publicación y la adjudicación de proyectos es un logro concreto y por ende una satisfacción, pero es un paso dentro de un continuo, ya que es parte del trabajo que hacemos en la universidad. Por ejemplo, en la PUC están claramente delineados los perfiles académicos, los profesores de planta de la Escuela de Periodismo tienen que adjudicarse proyectos y publicar. Otros docentes con perfil profesional y experiencia en medios tienen principalmente tareas de docencia en el pregrado. Esta distribución ha permitido el desarrollo del Programa de Doctorado en Comunicaciones, ya que disponen del claustro académico necesario para ello. Por lo tanto, es un desafío relevante avanzar en esta línea, sobre todo en una escuela como la nuestra que es la única en la macro zona norte del país.
En paralelo a las investigaciones, Salinas también dictó clases de Etnografía para estudiantes del Doctorado en Comunicaciones y un coloquio para la Facultad de Comunicaciones sobre lenguajes simbólicos y no simbólicos en el aula universitaria de carreras STEM.
Asimismo, la trabajadora social formó parte de dos congresos internacionales en España y Argentina, además de participar en el congreso nacional de Semiótica de la Universidad de Chile.
– Desde todo punto de vista la experiencia ha sido muy buena. Me ha permitido adentrarme en otra cultura académica, cuestión que analizo con mucho interés, ya que la Facultad y la PUC han logrado su nivel de desarrollo producto de un trabajo sistemático. Además, los estudiantes están concientes de la relevancia que tiene la institución y la cuidan. La calidad va unida al trabajo riguroso, cuestión que se ha debilitado en el sistema de educación superior en términos generales con las sabidas consecuencias.
Sobre movilizaciones sociales y feminismo
Durante su período sabático, la investigadora de estudios de género enfrentó el estallido social en la capital de Chile, epicentro de las movilizaciones que fueron impulsadas por la evasión masiva en el metro de Santiago.
-En el contexto del estallido social y las movilizaciones que han ocurrido a nivel nacional ¿Qué impresiones tiene de este proceso y la crisis sociopolítica que enfrenta Chile?
Hay una ‘tiranía democrática’ muy devastadora que nos arrincona entre los buenos y los malos, es decir, hay nuevas hegemonías donde la violencia masculina encuentra su mayor expresión.
Lo significativo de esto es que las mujeres se manifiestan sin atropellar los derechos de los otros y sin violencia, algo que se destaca poco y es muy relevante.