El galardonado periodista recuerda con orgullo su paso por la UCN, la que define como “su casa”.
A Matías Larraín el reconocimiento al mejor periodista de regiones lo tomó por sorpresa. Es que no han pasado mucho desde que egresó de la Escuela de Periodismo de la Universidad Católica del Norte (UCN) para perseguir su sueño de ser un comunicador deportivo.
El exalumno que formó parte de la Generación 2016, hoy es destacado por el Círculo de Periodistas Deportivos de Chile con el premio “Alberto Arellano”, al mejor periodista deportivo de regiones, celebrando su dedicación, esfuerzo y contribución a la comunicación deportiva.
El galardonado periodista recuerda con orgullo su paso por la universidad. Durante su pregrado, la Casa de Estudios no solo brindó una sólida formación académica, sino que también marcó su carrera profesional con el Sello UCN. Para él, la Escuela de Periodismo no es solo el lugar donde estudió, sino un espacio de acogida y crecimiento profesional, al que define como “su casa”.
¿Cómo fue tu paso por la Escuela de Periodismo?
El recuerdo es fresco, no han pasado más de tres años. Diría que fue demasiado enriquecedor, principalmente por la calidad humana de los docentes con los que me tocó coincidir. El trato, las buenas prácticas y sobre todo la preocupación que hasta la actualidad se mantiene. Si tuviera que elegir un recuerdo en particular, sería lo significativo que era la semana de la carrera, no existía diferencia tal y se formaba un clima absoluto de compañerismo.
¿Cómo influyó tu formación en la Escuela de Periodismo de la UCN en tu carrera profesional?
Es mi casa. Si bien desde primer año me inicié en los medios de comunicación, la sabiduría y experiencia de los docentes permitieron que ese desarrollo práctico, fuese acompañado con ser un profesional próspero en el lugar que me desarrollara.
¿Cómo ha evolucionado el periodismo deportivo desde que te graduaste de la UCN?
Hay un cambio drástico. La digitalización es y será el nuevo sistema, dejando obsoleto otros aspectos habituales como la radio, entre otros. En sí, existe un gran problema aún. Mucha gente intenta jugar a ser periodista sin serlo. Usan de forma indebida las redes sociales como método de información y transforman todo en un lío por las fakes news. Eso pasa mucho en el ámbito deportivo actual.
Reconocimiento
¿Qué significa para ti recibir el galardón al mejor periodista deportivo de regiones?
Es impensado. Te digo, a mi corta edad como profesional, suele ser raro que existan estos reconocimientos. Lo agradezco, pero también lo asumo de forma responsable, para no perder el foco del trabajo, que es que la gente quiere informarse.
Es un premio a la dedicación y esfuerzo. Los que estudiamos esta profesión, sabemos que en ocasiones hay que posponer acciones cotidianas por nuestras labores profesionales. Y no existe siquiera un reconocimiento pese al esfuerzo. Hoy, te puedo decir ese día llegó y es satisfactorio, pero lo tomo con un vaso de humildad para seguir proyectando mi carrera en aportar a la comunidad.
Mencionaste en otras entrevistas que tu padre (Rodolfo Larraín) fue tu mentor más importante ¿Por qué?
Estudié periodismo, por lo que viví de niño y adolescente junto a él. Si bien, solo logré compartir un año de esta profesión, siendo estudiante, fue la experiencia más enriquecedora y a la vez estresante por las exigencias para lograr las metas que me propuse. Para mí, es un referente como papá y como profesional. Al convivir con colegas que tuvieron la dicha de compartir con él, noto que era un monstruo del periodismo. Es notable.
¿Qué momentos o logros destacarías como los más importantes en tu trayectoria profesional?
Más que un logro, destacaría momentos. Las oportunidades que he tenido en la vida personal y laboral, que me permitieron tener experiencia y aprender constantemente de los errores. Si me caso con uno, puede ser la cobertura en el río Silala (tras el conflicto entre Chile y Bolivia en La Haya por el uso de sus aguas), para Mega. Ahí vi en primera persona a reporteros de los principales medios nacionales, lo que me permitió comprender la realidad del periodismo, en la práctica; en la cancha. Ese el real aprendizaje.
¿Qué consideras fundamental para tener éxito en el periodismo deportivo?
Más que en el periodismo deportivo, te hablaría del general. Creo que la clave es ser una persona de valores y no cegarse en sí mismo. Siempre escuchar opiniones. Nadie es dueño absoluto de la verdad. Lo que no quiere decir que debamos ser sobrepasados. El periodismo es entender que no todos estarán contentos con tu trabajo, pero es lo que todos necesitan saber.
Para finalizar, ¿Qué consejo le darías a los jóvenes periodistas UCN que aspiran a seguir una carrera en el periodismo deportivo?
No hay que bajar los brazos, jamás. Siempre hay puertas que se abren en el camino. Es un medio difícil, donde luchas con muchos egos, pero la base del éxito es el respeto y la realización de un periodismo responsable, sin caer en el sensacionalismo.
Distinciones
El Círculo de Periodistas Deportivos de Chile reconoce todos los años tanto a los profesionales más destacados en el ámbito del periodismo deportivo como a deportistas nacionales de excelencia.
La ceremonia se realizó en el Teatro Municipal de Las Condes, Santiago, otorgando diversos galardones a los distintos ganadores. En el Premio Nacional de Periodismo Deportivo, se distinguió a Cristián Arcos, periodista de ADN Deportes.
También se entregaron reconocimientos al desarrollo profesional, trayectoria, mejor periodista joven y maestros del periodismo.
Matías Larraín junto a su galardón.